Regreso al pasado

25 de julio de 2013. Era un día soleado y caluroso, en el cual la mejor opción era quedarse en la cama durante todo el día junto al aire acondicionado. Hoy era un día muy importante ya que mi novia regresaba de su viaje a Londres y tenía que ir a buscarla al aeropuerto. Estos días habían sido un poco raros, sentía que me hacía falta pero por otro lado... echaba de menos tener tiempo para mí, estar con mis amigos, poder componer... Lo necesitaba.

Una vez en el aeropuerto esperé a que aterrizara el avión. Estaba nervioso, me sudaban las manos...El último día que la vi discutimos y fue una despedida bastante amarga...Espero que ahora me reciba con un fuerte abrazo y un beso.

Cada vez estaba más impaciente...Veía a todo el mundo salir del avión menos a ella. Tenía un mal presentimiento...

-¿Señorita, ya han salido todos los pasajeros del avión?...Pregunté a la azafata.

-Sí señor, todo el mundo ha salido del avión. Dijo ella.

-Pero...es imposible! Mi novia me dijo que regresaba hoy de su viaje a Londres...Exclame.

-Quizás venga en el próximo vuelo. Dijo ella.

-Está bien. Esperaré. Gracias por todo. Dije.

En ese momento decidí llamar a Lucía para que me diera una explicación...Salto el contestador.

No tenía otra opción, tenía que esperar a que llegara el próximo avión, no podía irme a casa...

Pasaron las horas y seguía sin contactar con ella. Ahí estaba yo, solo y aburrido esperando a una persona que quizás no llegaría...

Por fin llegó el momento. El avión acababa de aterrizar en la pista. Crucé los dedos para que estuviera allí...

 Vi a la gente salir del avión...No la veía por ningún lado. No podía creerlo, otra vez había quedado como un imbécil...Me sentía tan mal conmigo mismo, todo me había salido mal... Entonces mi mente comenzó a pensar lo peor...Quizás no quería volver de Londres porque no quería seguir conmigo...o tal vez había encontrado a otro chico allí... No podría soportar algo así...

Cabreado por todo lo ocurrido decidí volver a casa. Estaba muy mal y necesitaba el apoyo de mis amigos... Sinceramente, no creo que me cogieran ni el teléfono, y mucho menos que siguieran a mi lado después de que mi novia me obligara a dejar de verlos...En estos momentos es cuando te das cuenta de lo ciego que estas y lo que puede hacerte cambiar el amor...

Decidí llamar a mi mejor amiga Carla, la cual llevaba meses sin verla...

-Hola Carla, soy yo, Esteban...Por favor no me cuelgues.

-Hola Esteban...La verdad me he quedado muy sorprendida al ver tu llamada... ¿Qué pasa?

-Estoy muy mal Carla. Me siento tan estúpido...Lucía no ha vuelto de su viaje a Londres. Llevo todo el día esperándola en el aeropuerto como un imbécil. Dije enfurecido.

-¿Quieres que sea sincera Esteban?...Pregunto.

-Si claro. Por algo eres mi mejor amiga...Dije.

-Para mí, es la mejor noticia que me puedes dar. Has cometido un gran error en dejar a tus amigos a un lado por una persona que solo te quería para ella. Te cegó por completo y ahora deberías pagar las consecuencias de ello. Quiero que te quede clara una cosa....Nosotros siempre hemos estado ahí. Ella no. Recuérdalo...

-Me merezco esto y mucho más Carla. Todo esto me ha hecho abrir los ojos, tengo que volver a ser el de antes...

-No sabes lo que me alegra oírte decir eso. Espero que esto sea para siempre.

-! Si!!Te lo prometo! Si de verdad me quiere, tendrá que aceptarme tal y como soy... Exclame.

-Bueno Esteban...Te propongo algo. Hoy habíamos quedado los chicos y yo para salir de fiesta...Me gustaría que vinieras con nosotros....Como en los viejos tiempos.

-Pero... ¿Y los demás? ¿Tú crees que me aceptaran? Después de todo lo que ha pasado...Dije.

-Si eres tú mismo, el de antes, te aceptaran. ¿Acaso no son tus amigos? Esto es como el matrimonio. En lo bueno y en lo malo....

-¡Esta bien! ¿A qué hora quedamos?...

Antes de irme, decidí mandarle un mensaje a Lucía. Un mensaje que marcaría un antes y un después en nuestra relación...

Lo siento mucho Lucía. He decidido volver a ser el de antes, un chico sencillo, sin miedo a lo que puedan pensar de mí y LIBRE. No entiendo porque me has hecho esto, ni porque no has contestado a mis llamadas... A llegado la hora de cambiar y de volver a retomar lo que un día deje atrás...Si de verdad me quieres, tendrás que aceptar a Esteban, el de siempre. Tú decides...

                    El verdadero amigo está en tu caída antes de que tu toques el suelo: siempre.